Mucho se habló de los grandes fichajes que estaba haciendo el Poblense de Óscar Troya para esta temporada, para conseguir el ascenso a la división de bronce de nuestro fútbol. Pero pocos fueron los que nombraron a Mateu Ferrer como una de las claves de la subida de escalón que ha sufrido el equipo.
No salió en la televisión su fichaje pues no fue tan mediático, pero sin duda, y partido a partido así se está confirmando, se está convirtiendo en el hombre clave de esta temporada. El Poblense de Óscar Troya siempre había destacado por su buen trato con el balón y su juego ofensivo, pero en momentos puntuales de la temporada en partidos trascendentes hacía falta mayor presencia en ataque.
La figura de Aitor Pons era muchas veces solitaria, y tenía que duplicar esfuerzos para conseguir hacer peligro contra equipos que les plantaban cara de tú a tú, y eso había ocurrido en los últimos play-off de ascenso. Le hacía falta un complemento, alguien que le acompañara en ataque.
Nico Rubio no acabó de funionar, pese a marcar 16 goles no acabó siendo el complemento que se esperaba de Aitor Pons, al igual que Dani Plomer que fue de más a menos y que acabó siendo suplente en momentos importantes. Y esa carencia parece haberse solventado con la llegada de jugadores que aportan más al ataque y con el complemento de Mateu Ferrer.
Así lo demostró el pasado fin de semana, salió al campo en Binissalem para desatascar un partido que pese al dominio el equipo no conseguía ver puerta. Y al poco de estar en el campo, Tià Sastre abrió la lata y el delantero minutos después sentenció el encuentro con un doblete.
Ahora mismo se encuentra entre los máximos goleadores de la categoría con siete dianas y siendo clave en el buen hacer del conjunto azulgrana. De aquí dos jornadas el conjunto visita al otro imbatido el Ibiza, en uno de los partidos más esperados de la temporada.