La situación es delicada en la isla pitiusa. El conjunto que hace dos años hizo historia en San Mamés es un vago recuerdo de lo que está sufriendo esta temporada, no por los resultados, sino por lo ajustada que es la plantilla esta temporada. La falta de presupuesto, las bajas sufridas en las últimas semanas han hecho que el equipo de Iván Gómez se plante partido tras partido prácticamente con lo puesto, y aún así siga compitiendo y sacando buenos resultados que le permiten seguir en las posiciones de play-off de ascenso, pero la situación necesita un cambio urgente.
Llega el mercado de invierno, pero fichar este año está difícil, y lo que más teme la entidad rojinegra es la fuga de alguna de sus estrellas que más está rindiendo esta campaña. El objetivo del equipo es mantenerse en la zona alta de la clasificación pero está prohibido hablar de ascenso, sería prácticamente una proeza, y ahora mismo el club no está en situación de asumirlo.
Por eso, más si cabe todavía, hay que destacar el trabajo y la profesionalidad de los jugadores y técnicos presentes esta temporada. El equipo es cuarto, a dos puntos del segundo y a cinco del Platges de Calvià de Carlos Martínez que es quinto en la tabla clasificatoria. Esperemos que pronto vuelva a recuperar efectivos y a ver si con un poco de suerte cae alguna ganga de mercado en el campo municipal de Sant Francesc.