Lamentable, desagradable, terrible…mucho más son los adjetivos que servirían para describir los hechos sucedidos en la mañana de ayer en el Cerro del Espino, cuando unas personas a las que les llaman aficionadas al fútbol hicieron daño al deporte cuando decidieron faltar el respeto con gritos racistas al jugador del Atlètic Balears Vinicius Tanque.
El Atlético de Madrid ya trabaja en identificar a los autores de tal hecho, los cuales deberán ser presentados ante la autoridad competente para que se juzguen sus hechos.
Los madrileños ya han condenado lo sucedido y a buen seguro que la estrecha relación entre rojiblancos y blanquiazules no quedará afectada por los tristes gritos de unas persona que no merecen volver a un estadio.
Son muchos ya las veces que hablamos de racismo en el fútbol y únicamente se llevan a cabo protestas puntuales para intentar erradicar este mal, pero es el momento de que lleguen cuanto antes las medidas oportunas para no tener que volver a escuchar o ver este tipo de actos los cuales se repiten de manera habitual en los campos.
Imagen: Atlètic Balears