El sueño tendrá que esperar

UD IBIZA 1 - 2 CORNELLÀ

Cristián Pérez (pp) / Agus, Pablo Fernández

Finalizó la temporada 2019-2020 para la UD Ibiza de forma inesperada, tras la derrota por 1-2 ante la U.E. Cornellà en el primer partido del Play-Off de ascenso a 2ª División A. Los pupilos de Pablo Alfaro no tuvieron su mejor tarde, sobretodo en la primera parte, donde fueron ampliamente superados a nivel táctico y físico por el conjunto catalán.

Los celestes se presentaban al estadio Ciudad de Málaga con la vitola de ser uno de los grandes favoritos al ascenso, por proyecto, presupuesto y plantilla. Pero en el momento de saltar al verde, las fuerzas se igualan, y en el encuentro de ayer, el Cornellà fue un equipo superior.

Los de la comarca del Bajo Llobregat llegaban al Play Off habiendo sido 4º del Grupo III, pero su posición era engañosa: empatados a puntos con el 2º y 3º clasificado, y a un solo punto del líder, el Castellón. A eso debemos añadirle que era su tercera participación consecutiva en el Play Off de ascenso, por lo cual era quizás el rival más incómodo que se podía encontrar en el sorteo el equipo ibicenco.

Los de Guillermo Romo iniciaron el encuentro mucho más enchufados e intensos que el equipo unionista. Presión alta que evitaba la salida de balón fluida desde atrás, una disposición táctica que convirtió el medio campo del Ibiza en un campo de minas y una intensidad que les hacían ganar todos los duelos aéreos y balones divididos.

Por su parte, Alfaro dispuso una defensa con cambios, debido a la lesión de Morillas (aún no recuperado al 100% de su grave rotura de tibia) y a la sanción de Pierre. Rubén, habitual central titular junto a Gonzalo, ocupaba el lateral izquierdo, mientras que Quintanilla acompañaba al capitán en el centro de la zaga.

Este comienzo tuvo su recompensa con dos goles prácticamente consecutivos que dejaron muy cuesta arriba la clasificación a los de Alfaro. En el minuto 13, Javi Jiménez botaba una falta lateral que llegaba hasta el segundo palo, donde Agus, totalmente libre de marca, pudo recibir y centrar al área, para que Becerra se impusiera a los centrales celestes y poner el 0-1 de un testarazo inapelable.

Casi sin poder de reacción, y con una defensa nerviosa y desconocida (la UD había sido el equipo menos goleado de toda la categoría), llegaría el 0-2, cuando Pablo Fernández, sin oposición defensiva, enganchó un zurdazo desde la frontal del área que se introducía por la escuadra de Germán.

Era el minuto 16 y la clasificación se ponía muy cuesta arriba para los celestes.

Para mayor desgracia, en el minuto 23 cayó lesionado Raí, quizás el hombre con mejor desborde de los ibicencos, quien tuvo que ser sustituido por Cirio. Los siguientes minutos no significaron una reacción celeste, más bien al contrario, el Cornellà seguía muy cómodo sobre el terreno de juego, y cada contra portaba un peligro mayúsculo para la zaga celeste.

El arquero catalán no fue forzado en ninguna jugada de la primera mitad, y no sería hasta el descuento previo al descanso cuando llegaría la primera ocasión clara de la UD, en una semivolea de Javi Pérez tras centro de Cirio que saldría lamiendo el poste derecho de Ramón Juan.

El tiempo de descanso llegaba con pesimismo para las filas celestes, y poco hacia presagiar una reacción que consiguiera la remontada. El técnico aragonés de la UD Ibiza movió el banquillo dando entrada a Fran Grima y Diego Mendoza por Gonzalo (problemas físicos según comunicó el propio Alfaro) y Javi Pérez (uno de los pocos destacados de la primera parte). El lateral catalán, aún a pierna cambiada, dio más profundidad por la banda izquierda, mientras que el ariete argentino luchaba con los serios centrales catalanes y lograba darle más opciones en ataque a les celestes.

La reanudación le sentó bien a la UD, que poco a poco fue entrando en juego y comenzó a dominar a un rival que se encerraba en su área para conservar el marcador. Javi Lara, inédito en la primera parte, se hizo con la batuta en medio campo, y los celestes comenzaron a llegar con peligro al área. En el minuto 61 Borja probó fortuna con un lanzamiento lejano que tuvo que detener Ramón Juan en dos tiempos. Era el preludio del 1-2, que llegaría dos minutos después. Rodado remató al área pequeña un centro lateral de Javi Lara, con mala fortuna para Cristian Pérez, quien en su intento de despeje introdujo el esférico en su propia portería.

Quedaba casi media hora de juego y se podía esperar una mayor reacción de los unionistas, pero el míster del Cornellà movió el banquillo para dar oxígeno a su plantel, el cual volvió a crear problemas a la zaga celeste y a cortar de raíz la reacción ibicenca.

Aún así, Cirio tuvo en sus pies la posibilidad del empate en el minuto 74, cuando el central Pérez cortó in extremis un remate del ariete ibicenco en el punto de penalti.

Los minutos restantes hasta el final fueron una lección de oficio y experiencia del Cornellà. Los verdiblancos se dedicaron a dormir el partido, forzar saques de banda y esquina y hacer que el tiempo pasara sin que ocurriera nada. A la UD no le acompaño ni el físico, ya que no hubo ni siquiera oleada final a la heroica. Los últimos minutos se jugaron en el área celeste, incluso con alguna contra peligrosa para los catalanes que pudo suponer el 1-3.

Finalizaba así una temporada histórica para la entidad y la isla, marcada de forma inevitable por la crisis de la Covid 19, hecho que llevó a la suspensión de la competición el pasado mes de marzo y a la creación de este Play Off exprés de acenso a 2ªA a la RFEF a partido único, en sede neutral, y sin público. Desde aquel momento, han sido dos meses de preparación para el debut en una fase de ascenso a la Liga de Fútbol Profesional, la cual no ha llegado a buen puerto.

El mal sabor de boca final no debe hacernos olvidar, como indicábamos en el análisis de la semana pasada, que la temporada ha sido sobresaliente. Para un club retomado desde Regional Preferente hace cinco años por Amadeo Salvo, le evolución ha sido exponencial, encontrándose ahora mismo como un proyecto sólido, serio e ilusionante, y que ha enganchado a buena parte de la isla.

El equipo ha ocupando plazas de Play Off desde la jornada 4, se encontraba a tiro del liderato justo en el momento de la suspensión de la competición y como olvidar el mes de enero y las eliminatorias de Copa del Rey ante Pontevedra, Albacete y sobretodo Barcelona

La Segunda División B es quizás la categoría más complicada de todo el panorama futbolístico nacional. Una liga regular de 38 partidos más un Play Off de una a tres eliminatorias hacen que el ascenso sea en ocasiones una tarea muy complicada, por muy ambicioso que sea el proyecto. Equipos centenarios, con muchas temporadas en Primera y Segunda División, caen a esta categoría y en muchas ocasiones les cuesta años e incluso décadas volver al fútbol profesional.

Debemos ser pacientes y aceptar la dureza de la competición, que en ocasiones se gana y en otras se pierde, y seguir confiando y animando a que este proyecto continúe creciendo.

La temporada 2020-21 se presenta con muchos cambios e incógnitas en cuanto al sistema de competición y presencia de aficionados en las gradas, pero con una certeza: la UD Ibiza estará más viva que nunca.

Por Jaime Orvay