Jornada de ilusión y fe tanto para Son Sardina como para el Port de Sóller, dos equipos que encadenaban una mala racha de resultados y que estaban en el pozo del descenso y que tras conseguir sendas victorias a domicilio empiezan a creer que la salvación es posible.
El Son Sardina se llevó tres puntos ante un Son Verí plagado de bajas pero siempre competitivo. Aprovechó las ocasiones que tuvo y sentenció el encuentro en los instantes finales cuando más apretaba el conjunto de Rubén Oliva. El Port de Sóller de Xavi Radó remontó un encuentro que se había puesto cuesta arriba, cuando Adriano batía a Pascual en el minuto dos de partido. La entrada en la segunda mitad de Julio y Lluri cambiaron la imagen de los visitantes y en cuestión de 6 minutos La Unión quedó noqueado con dos goles, uno de Juanmi y otro de Josete.
Tres puntos de fe, tres puntos de oro para dos equipos que no están pasando por un buen momento.