Un final de liga de infarto

Restan siete jornadas en las que muchas cosas pueden cambiar aún.

En la Primera Regional Preferente mallorquina encontramos tres bloques bien diferenciados entre sí. El primero lo constituyen tres equipos (Sóller, Murense y Andratx), que pelearán por el liderato de la categoría. En un segundo grupo tiene lugar la lucha donde la mayoría de equipos están involucrados: desde el cuarto (Sant Jordi) hasta el décimo séptimo clasificado (Sineu). Con 21 puntos aún por disputarse, todos estos conjuntos aún no están en tierra de nadie. Tanto pueden clasificarse para la promoción de ascenso como perder la categoría.

En el primer bloque, el Sóller, líder de la liga desde la primera jornada, ha aflojado notablemente en el segundo tramo del curso. Eso ha posibilitado que Murense y Andratx, que están haciendo una segunda vuelta formidable, se le hayan acercado a seis y nueve puntos, respectivamente. Si el Sóller continúa dejándose puntos por el camino, los de Muro y los de Andratx intentarán aprovecharlo y seguir sumando de tres en tres para apurar sus opciones de ascender directamente a Tercera División.

En el segundo bloque es donde las posibilidades están más abiertas. Hasta un total de 13 equipos se concentran en tan sólo nueve puntos. La línea que separa las posiciones de descenso con las de play off de ascenso es muy estrecha, hecho que supone que cada partido sea de extrema importancia. Una derrota te puede mandar al pozo y una victoria te puede lanzar a posiciones privilegiadas. Además, otro factor a tener en cuenta es que esta temporada pueden descender hasta cinco equipos, dependiendo de los equipos mallorquines que caigan desde Tercera a Preferente. Por esa razón, en Preferente no se puede especular y hay que intentar quedar lo más arriba posible.

Y, por último, hay un tercer grupo de equipos que ya están descendidos matemáticamente y que la temporada que viene serán carne de Primera Regional. Éstos son el Cardassar, el Independiente y el Llosetense B. Sin embargo, en los bloques uno y dos la emoción va a estar servida hasta la última jornada del campeonato.

Malik Dehouche