Mantener el ritmo de victorias que estaban consiguiendo los de Ca´n Maiol era muy difícil y los de Tovar&Radó están sufriendo en este mes de febrero su peor momento de lo que va de campeonato.
El derbi contra el Port de Sóller fue la puntilla para un equipo que hasta el momento estaba dominando con mano de hierro la categoría, ganando con suficiencia los partidos y consiguiendo abrir una brecha prácticamente definitiva para conseguir el título y ascenso a la Tercera División. Una victoria, un empate y tres derrotas son el balance de los sollerics que a pesar de los pobres números que han obtenido siguen contando con un amplio colchón sobre el segundo clasificado, el Murense que se encuentra a diez puntos.
El Sineu será el siguiente rival del líder, un equipo como el de Perelló que buscará hurgar en la herida de un conjunto como los de la Vall que quieren recobrar cuantos antes sus mejores sensaciones y sentenciar el título que da el esperado ascenso.